El proyecto vencedor de entre 14 finalistas fue Chevolek, destinado a una higiene de vacunos más pasiva y menos agresiva que la convencional.
El proyecto “Chevolek”, creado por estudiantes de segundo año medio del Liceo Agrícola San Sebastián de la comuna de Perquenco, fue el ganador del concurso SaviaLab 2018 que por segundo año consecutivo organiza la Universidad Católica de Temuco y es financiado por la Fundación para la Innovación Agraria (FIA).
Tal fue el resultado de un extenso certamen que partió en marzo de este año, con el objetivo de que los jóvenes miraran su territorio con un punto de vista crítico e idearan la solución a un problema local. Bajo este contexto, nuestra Universidad llevó a cientos de escolares de establecimientos técnico agrícolas a conocer sus instalaciones, aprendieron cómo idear y formular una idea y finalmente compitieron entre ellos mismos poniendo a prueba su creatividad y argumentación.
“La valoración, el reconocimiento de lo que tienen como recursos para salir adelante, para apoyar, para hacer su proyecto de vida también, es indispensable para una sociedad que nos permita mayor equidad y justicia en los distintos escenarios”, indicó Pablo Flores Durán, vicedecano de la Facultad de Arquitectura, Artes y Diseño UC Temuco, cuyo Departamento de Artes organiza el concurso SaviaLab en conjunto con el Centro de Fortalecimiento Integral de Capacidades Locales (Cefic) de la UC Temuco.
En la jornada final, 14 iniciativas quedaron en la terna definitoria. Los representantes de cada grupo debieron defender sus ideas ante el jurado, pero finalmente el Liceo Agrícola San Sebastián (que logró posicionar a cuatro ideas en la final) se llevó el gran premio de una gira tecnológica hacia La Serena.
El nombre del proyecto ganador, Chevolek (“compañero” en ruso), fue extraído de un documental que los niños observaron en clase de agronomía, donde conocieron la violencia con la que bovinos suelen recibir su baño higiénico. Es ahí de donde sacaron una idea más pasiva. “Es un sistema en que nos aprovechamos de los instintos animales. Como son animales de caza, tienen el instinto en que al caminar en curvas se sienten más seguros y en nuestro sistema hay caminos curvos. El sistema de baño es por aspersores, que aparte de limpiarlos los relaja”, explicó Dilan Saavedra, integrante del grupo ganador.
Johanna Espinoza Torres, profesora del grupo ganador, aseguró estar orgullosa por la creatividad de todos los trabajos presentados. “Un trabajo de todo un año, todo un semestre investigando, buscando soluciones, haciendo prototipos, hasta que finalmente llegaron a lo que mostraron hoy. Ellos son expertos en el tema porque le pusieron bastante talento y entusiasmo”, reconoció la docente.
Desde FIA consignaron esta versión del concurso como todo un éxito y ahondó en la importancia para la formación de los más jóvenes el que la Universidad Católica de Temuco les otorgue este espacio de resolución de problemas. “Es muy necesario porque es una oportunidad para ellos de integrar distintas disciplinas con sentido de realidad, de pertinencia, sobre todo con sentido personal, y además importante porque les deja habilitados con una forma de enfrentarse a la vida que les permite pararse desde otro lugar en el mundo de aquí en adelante”, expresó Dominique Chauveau, jefa de la Unidad de Desarrollo Estratégico de FIA.